La deuda de entidades financieras por los pisos que se han quedado durante la crisis solo disminuyó un 12,8% en 2016

La morosidad que sufren muchas comunidades de vecinos no es algo nuevo, pero sí un problema que se agravó durante la crisis económica. Además, los años de recesión hicieron ganar protagonismo a un sector que hasta entonces había permanecido en un segundo plano: las entidades financieras. Promotores, inmobiliarias y muchas familias no pudieron hacer frente a los préstamos que habían contratado por lo que los pisos que habían adquirido pasaron a ser propiedad del banco.

La mayoría de estos nuevos propietarios, ante el gran volumen de viviendas o locales de los que se hicieron cargo y a los propios problemas económicos por los que estaban atravesando, decidieron no pagar la cuota a la comunidad de vecinos o no hacerse cargo de lo que tenía pendiente el anterior dueño, lo que generó una deuda que está costando reducir. En Salamanca ha disminuido algo menos de un 13% en 2016, según los administradores de fincas, por lo que las entidades financieras aún deben 1,86 millones de euros a las comunidades de vecinos salmantinas.

La buena noticia para el sector es que la deuda de los bancos muestra por fin una clara tendencia a la baja. En 2014 la cuantía que debían los bancos a las comunidades ascendió a su valor más alto, 2,5 millones de euros según el informe del Consejo General de Colegios de Administradores de Fincas. El montante cayó hasta los 2,13 millones en 2015 y en 2016 se ha quedado en 1,86 millones. La bajada del 12,81% al menos supera la disminución media en Castilla y León —11,86%—, así como la nacional —12,2%—
Fuente: lagacetadesalamanca.es

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